Rodin, a quien se le había encargado una obra conmemorativa del más grande novelista francés, se dedicó durante siete años al estudio de la biografía y la obra del escritor, se hizo poner modelos que se parecían a él y confeccionó ropa a sus medidas. el aspecto físico de “Honorè di Balzac” como la idea y el espíritu del hombre, su energía creativa: “Pienso en su laboriosidad, su existencia difícil, sus batallas perennes y su coraje inmenso. Esto me gustaría expresarlo: “Muchos de los estudios de esta obra son desnudos, pero Rodin vistió la figura inspirándose en la bata que solía llevar el escritor al que le encantaba trabajar de noche. El resultado es una figura monolítica, de pie -solo, fálico, que se eleva hacia arriba, dominado por el relieve rugoso y las cavidades que definen su rostro y cabeza. El monumento a Balzac es la metáfora visual de la energía y el genio del autor, pero cuando el yeso fue expuesto por primera vez en París en 1898 fue duramente criticado; Acusado de parecerse a un saco de carbón, un muñeco de nieve, una foca, la compañía literaria que había encargado la obra la calificó de “boceto”. Solo años después de su muerte se realizó la fundición en bronce.
Venderecuadros Highlights-Auguste Rodin – Monumento a Balzac
